20 julio 2007

Recuperación política de Iraq requiere tiempo y esfuerzo, dice embajador de EE.UU.

Crocker asevera que cada región de Iraq tiene problemas particulares

Washington – La reconciliación política en Iraq demandará tiempo y el constante apoyo de Estados Unidos hasta que la sociedad iraquí elimine el legado de 35 años de tiranía, dijo el embajador Ryan Crocker a los senadores el 19 de julio.

“Si hay una palabra que utilizaría para resumir la atmósfera en Iraq, en la calle, en el campo, en los barrios y  nivel nacional, esa palabra, es la palabra miedo”, dijo Crocker a la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, en una conexión vía vídeo desde Bagdad, Iraq.

“Para que Iraq avance en cualquier nivel, ese miedo debe ser reemplazado por un nivel de confianza, de seguridad, y eso es de lo que se trata el esfuerzo a nivel nacional”, añadió.

La “estrategia de incremento” de 2007 de la administración Bush para desplegar tropas adicionales en la región de Bagdad y en otros lugares con problemas, ha reducido la violencia sectaria a “un grado bastante notable”, dijo Crocker. Ahora, el gobierno iraquí debe emprender acciones específicas para conseguir la reconciliación política entre sus comunidades sunitas, shiítas y kurdas, agregó.

En mayo, el Congreso de Estados Unidos solicitó informes de progreso sobre 18 indicadores o “marcas determinadas” diseñadas para evaluar la efectividad de las fuerzas de seguridad iraquíes entrenadas por la coalición y el desempeño de los mandatarios elegidos en el país.

El senador Joseph Biden, presidente de la comisión, destacó un informe transitorio de progreso que la Casa Blanca publicó el 12 de julio, que indica que en ocho de los indicadores políticos establecidos con el objeto de obtener progresos hacia la reconciliación el avance había resultado insatisfactorio. (Ver artículo relacionado).

“A mí me parece que ahora no hay confianza en el gobierno, la gente no tiene fe en el gobierno y no veo ninguna posibilidad real de desarrollo de capacidad por parte del gobierno para poder ofrecer servicios básicos y de seguridad”, dijo Biden.

Aunque los indicadores son importantes para medir el progreso, Crocker advirtió a los senadores que no confiaran completamente en los indicadores establecidos en Washington.

“El progreso en Iraq no puede analizarse sólo en términos de indicadores discretos y precisamente definidos”, comentó Crocker. “En muchos casos, esas marcas no sirven como medidas fiables de todo lo que es importante, las actitudes iraquíes de unos a otros y su voluntad de trabajar en la reconciliación politica”.

Desde la publicación del informe transitorio el presidente Bush ha instado a los mandatarios elegidos a conceder tiempo para que la estrategia de incremento surta efecto. Ha enviado a altos funcionarios al Capitolio, incluyendo al Asesor de Seguridad Nacional Stephen Hadley y a la secretaria de Estado Condoleezza Rice e invitado a 200 miembros Pentágono a una sesión clasificada, con preguntas y respuestas en el Pentágono, con Crocker y el jefe de la coalición militar el general David Petraeus, el 19 de julio.

Las fuerzas de la coalición están estableciendo cimientos seguros para el progreso político en Bagdad, en la provincia de Anbar y en todas partes, pero Crocker destacó que cada región se enfrenta a desafíos particulares en la consecución de la reconciliación política.

“Cada región del país debe ser comprendida y tratada en sus propios términos” indicó.

El gobierno iraquí tiene mucho camino que recorrer, agregó Crocker, y se merece el apoyo de la comunidad internacional cuando toma las medidas necesarias hacia la reforma. Los diplomáticos estadounidenses en Iraq continúan dedicados a ayudar a los líderes iraquíes a crear confianza y seguridad en las nuevas instituciones democráticas, señaló.

Crocker destacó el trabajo del Consejo Ejecutivo de Iraq, un cuerpo compuesto por el presidente, dos vicepresidentes y el primer ministro, que se reúne todas las semanas para revisar el progreso del gobierno y considerar nueva legislación. Representa en general a las diversas comunidades del país y pone énfasis en el consenso, lo que ilustra el modo en que el sistema de la democracia puede servir a todos los iraquíes.

El fortalecimiento de las instituciones a nivel provincial, dijo Crocker, indica una tendencia igualmente importante a que la reconciliación política se haga “desde abajo hacia arriba”. Lo que requiere una cuidadosa cooperación y abre las líneas de comunicación para evitar que las sospechas y la desconfianza desvíen el proceso.

Los grupos internacionales de trabajo sobre energía, seguridad fronteriza y refugiados también tienen un papel en el avance del progreso político, dijo Crocker. Han ayudado a todos los países vecinos a hacer contribuciones productivas en el futuro de Iraq.

Crocker también elogió a las Naciones Unidas por su trabajo en el apoyo de elecciones democráticas, asistencia a los desplazados iraquíes por la violencia sectaria y ayuda a redactar el compacto internacional para Iraq, un acuerdo multilateral dirigido a facilitar la asistencia a largo plazo para la transición democrática del país. Crocker solicitó más personal y fondos de la ONU para ayudar al país.

El texto completo de las declaraciones de Crocker como fueron preparadas con anticipación puede consultarse, en inglés, en el sitio web de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado.

 

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